El consumo excesivo de bebidas colas también puede traer trastornos musculares, por falta de potasio.
Una Nueva advertencia relacionada con las bebidas cola ha sido publicada en la revista médica International Journal of Clinical Practice: según un grupo de especialistas, el consumo excesivo de este tipo de bebidas puede traer graves problemas de salud, incluidos trastornos musculares.“
“La sociedad está, cada vez más, consumiendo los refrescos del tipo cola y esto está comenzando a generar una serie de problemas en la salud.
Estamos en este momento consumiendo más refrescos que nunca y una serie de cuestiones de salud ya se han identificado, problemas relacionados en dentaduras incluyendo desmineralización ósea y el desarrollo del síndrome metabólico y diabetes”, afirmaba al respecto el Dr. Moisés Elisaf, del Departamento de Medicina Interna en la Universidad de Ioannina, en Grecia.
“Al respecto, tenemos cada vez más evidencias que nos permiten sugerir que el exceso de consumo de estas bebidas cola puede también dar lugar a hipopotasemia, en la que la caída los niveles de potasio en sangre, terminan provocando un efecto adverso en las funciones vitales de los músculos”, aseguró el especialista.
La ‘ hipopotasemia’ se caracteriza por un desequilibrio hidroelectrolítico del cuerpo,que se caracteriza por un descenso en los niveles del ion potasio (K) en la sangre y que puede tener varias causas: entre las más frecuentes destaca una dieta irregular y desequilibraba, un aumento en las pérdidas de potasio, las hiperglucemias, etc.
Como el potasio tiene la función de facilitar la transmisión del impulso nervioso a través de la membrana celular, los síntomas de este trastorno suelen ser cansancio, mialgias (dolor en los músculos), o incluso puede llegar a producirse una debilidad progresiva con hipoventilación y posible parálisis completa.
Lo cierto es que el equipo del doctor Elisaf demostró que los síntomas pueden variar desde una leve hasta una profunda debilidad o una parálisis parcial. De todos modos, los pacientes estudiados lograron una rápida y completa recuperación después de haber dejado de beber bebidas colas o recibir por vía oral o intravenosa complementos de potasio.
Los estudios contaron con la participación de consumidores habituales de este tipo de bebidas, cuyas cantidades podían ir de entre dos y nueve litros por día. En análisis de laboratorio, se les encontró niveles bajos de potasio, y los pacientes expresaron sentir síntomas de fatiga, pérdida del apetito y vómitos, creciente debilidad muscular, entre otros trastornos relacionados.
Los responsables del estudio aseguraron sin embargo que es necesario profundizar la investigación para poder determinar claro “cuánto es demasiado cuando se trata del consumo diario de bebidas de este tipo” , y además reclamaron que “ la industria de las gaseosas” promueva “ campañas sobre la seguridad y el consumo moderado de sus productos para todos los grupos de edad, además de reducir los tamaños de los
envases y satisfacer la creciente demanda de bebidas saludables” .
Finalmente, y sólo para graficar el panorama del consumo de bebidas colas en el mundo:
en 2007, el consumo anual de bebidas refrescantes alcanzó los 552 millones de litros, lo que equivale a poco menos de 83 litros por persona y año. Pero aún peor, se prevé que este consumo aumente a 95 litros por persona y año para el 2012.
Sin embargo, esta cifra ya ha alcanzado un promedio de 212 litros por persona y año en países como Estados Unidos, en donde el consumo de este tipo de refrescos es abusivo.
martes, 26 de enero de 2010
lunes, 25 de enero de 2010
Deliciosos Jugos Naturales
Jugo de remolacha con pepino
Ingredientes:
½ remolacha mediana, ½ pepino pequeño, 250 ml. de agua mineral y sal al gusto
Preparación:
Mezcle los ingredientes en la licuadora, y sirva como aperitivo con hielo y ramitas de perejil.
(Rinde una porción; 56 calorías por porción)
Té verde con manzana y menta
Ingredientes:
300 ml de agua hirviendo, 1 saquito de té verde, 4 ramitas de menta fresca, 100 ml de jugo de manzana sin azúcar y 1 cucharada de jugo de limón.
Preparación:
Ponga el saquito de té en el agua hervida y agregue 2 ramitas de menta. Deje enfriar y agregue los jugos de manzana y limón. Refrigere y después sirva con ramitas frescas de menta.
(Rinde una porcíón. Cada porción tiene 53 calorías)
Jugo de sandía con jengibre
Ingredientes:
1 vaso mediano de trozos de sandía, una cucharada de jengibre cortadito y 250 ml. de agua
Preparación:
Pele y corte el jengibre en pedacitos muy chicos; coloque los trozos de sandía, el agua y el jengible en la licuadora; pase el jugo por un colador, refirgere y sirva.
(Rinde una porción; 50 calorías por porción).
Ingredientes:
½ remolacha mediana, ½ pepino pequeño, 250 ml. de agua mineral y sal al gusto
Preparación:
Mezcle los ingredientes en la licuadora, y sirva como aperitivo con hielo y ramitas de perejil.
(Rinde una porción; 56 calorías por porción)
Té verde con manzana y menta
Ingredientes:
300 ml de agua hirviendo, 1 saquito de té verde, 4 ramitas de menta fresca, 100 ml de jugo de manzana sin azúcar y 1 cucharada de jugo de limón.
Preparación:
Ponga el saquito de té en el agua hervida y agregue 2 ramitas de menta. Deje enfriar y agregue los jugos de manzana y limón. Refrigere y después sirva con ramitas frescas de menta.
(Rinde una porcíón. Cada porción tiene 53 calorías)
Jugo de sandía con jengibre
Ingredientes:
1 vaso mediano de trozos de sandía, una cucharada de jengibre cortadito y 250 ml. de agua
Preparación:
Pele y corte el jengibre en pedacitos muy chicos; coloque los trozos de sandía, el agua y el jengible en la licuadora; pase el jugo por un colador, refirgere y sirva.
(Rinde una porción; 50 calorías por porción).
martes, 12 de enero de 2010
ATAQUES DE PÁNICO
Porqué
En la infancia tenemos una idea ominipotente y fantasiosa sobre nuestras limitaciones físicas. Podemos pensar que nunca envejeceremos y moriremos o que será tan tan lejos que prácticamente no ocurrirá nunca. Quizá estas ideas nos preparan mal para la práctica sensata del auto-cuidado, y de ahí que durante un largo periodo juvenil podamos abusar de nuestra aparentes 'energías ilimitadas' para trasnochar, mal alimentarnos y también para adquirir la mala costumbre de preocuparnos y sufrir sin que aparentemente ello implique mayores complicaciones.
Pero un buen día las cosas pueden cambiar y enviarnos repentinas señales de funcionamiento corporal anómalo, como si el cuerpo ya no tolerara el mismo ritmo de agobio que tenía hasta el día anterior.
Pero un buen día las cosas pueden cambiar y enviarnos repentinas señales de funcionamiento corporal anómalo, como si el cuerpo ya no tolerara el mismo ritmo de agobio que tenía hasta el día anterior.
Cómo
La persona intenta en un momento dado detener su ritmo frenético. Se sienta, se para en frente al semáforo, espera en una cola, se tumba a descansar un rato, intenta mirar la televisión, está sentado en un medio de transporte, etc., Es precisamente eso, que estamos haciendo algo que no es particularmente activo lo que nos desconcierta, porque repentinamente notamos que no podemos hacer la cosa tan tranquila que queríamos hacer, porque el sistema nervioso está demasiado alterado para bajar de tan arriba a tan abajo en un instante.
En un segundo percibimos esta dificultad anómala, podemos observar los efectos de la taquicardia (acaloramiento de la parte central del cuerpo, aceleración respiratoria), nuestra respiración parece ser incómoda, y los mecanismos automáticos del control del ritmo respiratorio deciden hacer paradas bruscas que nos desconciertan (¿Me quedaré sin aire, pensamos?), se ha disparado nuestro sistema de alarma como esas alarmas de la tienda de al lado que se conecta un día de viento sin más ni más.
En un segundo notamos el encendimiento que produce en nuestro cuerpo el estado de activación general (pensemos por ejemplo en la reacción que sentiríamos ante un susto intento repentino, como ver aparecer un perro en nuestra habitación o que se rompieran los vidrios de una ventana, una explosión, etc.).
Pero como nada pasa en el exterior, pensamos, ¿Qué me sucede? ¿Me estaré muriendo? ¿Será esto un ataque cardíaco, colapso respiratorio, embolia cerebral? ¿Será esto que tengo un ataque de locura? ¿Cómo me puedo morir ahora sin haber hecho testamento o dejando las cosas sin arreglar?
Pensar este 'diagnóstico' no es precisamente tranquilizador... Así que si ya estamos 'encendidos' creernos en grave peligro acaba de provocar un incendio. Estamos en pleno pánico. Sube el nivel de ansiedad provocando más efectos espectaculares (temblor de piernas, sensación de vértigo, rigidez de nuca, visión borrosa, sensación de flotar e de irrealidad)
Puede que se acuda a un servicio de urgencias por si las dudas, y ahí, tras las pruebas oportunas nos digan que no era nada grave, sólo un ataque de ansiedad. ¿Pero cómo nos podemos convencer de que no era NADA, si nosotros en realidad nos sentimos terriblemente mal?.
El habernos sentido tan traspuestos, el que eso sucediera en un momento tan tenso de nuestra vida en medio de las complicaciones y exigencias, y encima el miedo a que se repita... con qué facilidad se puede efectivamente repetir el episodio que deseábamos que ¡por favor! no volviera otra vez...
Comprendiendo lo que pasa
Como podemos observar por esta descripción en el ataque de pánico hay dos fuerzas que se unen y se suman:
- un estado de ansiedad que predispone a padecer molestias en la regulación del sistema nervioso (dificultad de relajarse, disparo automático de la sensación de alerta, cambios bruscos de ritmos).
- la percepción de este estado no como una molestia física menor, sino como algo terrible, enigmático y sumamente desagradable (algunos dicen que preferirían que les cortaran una mano antes de pasar por esos mementos). Tenemos la sensación de perder el control voluntario (¡horror!) y sentirnos débiles, desvalidos e impotentes (reacción de quedarnos clavados, paralizados y bloqueados).
Si lo expresamos con un esquema diríamos que
- Estímulo de Ansiedad -->
- provoca respuesta intensa de miedo -->
- la respuesta de miedo de nuevo genera más de lo mismo, una ansiedad todavía mayor -->
El estado de ansiedad producido por un estado general ocurre más bien al principio, pero al cabo de un cierto tiempo en realidad la causa de ansiedad deja de ser la que era y cambia a ser nuestra propia suspicacia y nuestro temor supersticioso de que pueda volverse a repetir, o el percibir el más mínimo estado corporal que nos parezca extraño, o el simple 'pensar en ello'. Eso explica que aunque pudieran suprimirse las causas primeras (pueden haber cambiado algunas circunstancias o hemos comenzado a tomar tranquilizantes) puedan haber sido sustituidas por otras.
En realidad, bajo el punto de vista del trastorno psicológico, lo relevante no es el haber tenido un ataque de pánico, que de hecho algunas personas tienen por haber cuidado a un enfermo varias noches seguidas, haber bebido más de la cuenta, por efecto del consumo de algunas drogas o medicaciones, y que reconocen como 'lógico' debido al exceso, y que olvidan. Lo importante es que la persona que ha padecido un ataque de pánico:
- no comprenda que 'excesos' esta cometiendo en su vida, o que no le parezcan 'lógicos' como explicaciones.
- no tome las medidas adecuadas que tomaría frente a otro trastorno físico (o sea no varía su vida ni un milímetro)
- comience a desarrollar conductas contraproducentes (o sea, que hace todo lo contrario que tendría, como preocuparte, anticipar situaciones, estar auto-observándose, caer en el alarmismo, enfadarse, deprimirse, etc..). La principal conducta contraproducente es la evitación de situaciones en las que uno cree que podría suceder el ataque (la situación en la que la persona sentiría 'atrapada'). Esta conducta produce lo que se llama agorafobia, que la podríamos traducir como el miedo que se tiene a padecer una crisis de ansiedad o ataque de pánico en situaciones de indefensión (lejos, solos, encerrados, con mucha gente, delante de personas ante las que queremos quedar bien, etc.)
- la auto-provocación (involuntaria) como cuando uno piensa que podría vomitar y sólo pensar en el asco que le daría ello le produce las nauseas que le confirman sus ganas de vomitar. De igual modo el pensamiento sobre la ansiedad produce ansiedad, la ansiedad se puede percibir con la lupa de la atención, que agranda en relieve y tecnicolor todas las sensaciones físicas, lo cual crea la sensación que está ya sucediendo lo que uno teme que suceda, y la sensación de que si algo empieza uno está perdido y no podrá evitar lo peor, y que hay que estar preparados para lo peor de lo peor que podría suceder...
¿Qué hacer?
Los pasos a seguir son:
- Hacer análisis médicos para descartar enfermedades de carácter orgánico (en particular trastornos endocrinos, circulatorios, dificultes de tensión arterial, etc.)
- Una vez establecida la causa psicológica hacer una reflexión acerca de cómo estamos viviendo, en qué puntos nos estamos 'pasando de la raya' y qué medidas de salud podríamos tomar (descanso, alimentación, ejercicio, diversión, cambio de actitudes).
- Llevar vida normal (llevar vida de enfermo incurable no nos hace sentir precisamente normales). La causa de la ansiedad no es externa sino interna, así que el mundo no tiene la culpa y sería inútil tomar medidas de precaución porque el miedo puede perfectamente cambiar de 'tema' una vez que cedemos en evitar determinada circunstancia.
- Evitar todo tipo de anticipación o pensamiento sobre la ansiedad: esta es la causa más importante del mantenimiento y crecimiento de la ansiedad. Una especulación es cizaña que sembramos y provoca mayor inseguridad. Lo correcto es 'vivir sin pensar' hasta que llegue el momento X, en el cual nos limitamos ha hacer lo que sigue a continuación.
- Tener preparado un guión para decirnos es ese momento (este guión se ha podido preparar previamente con un psicólogo, y contiene fundamentalmente la idea de lo que nos pasa en que tenemos mucho miedo, pero el miedo no nos hará morir, y simplemente es algo que 'bajará' en la medida de que actuemos con normalidad. No me muero, es sólo miedo.
- Respirar hondo. Si notamos cosquilleos en las puntas de las manos o en los pies significa que estamos ventilando o oxigenando más de la cuenta y que lo que interesa en 'parar', por lo que aguantaremos el aire contando tranquilamente uno, dos, tres, cuatro, y expulsaremos el aire suavemente, y repetimos la operación hasta notar que de esta forma introducimos menos exógeno, desaparece el síntoma del cosquilleo y nos resulta más cómoda la respiración.
- Mirar algo y centrar la visión en el mundo externo (veo un cuadro, una matrícula de coche que comienza por... ) Este ver-afuera nos ayudada a saber si vemos bien y a recuperar la agradable sensación de equilibrio. También conviene oir-fuera (que sonidos escucho, que canción suena, cómo oigo mi propia voz) y tocar alguna cosa como mi ropa, un mueble, un objeto cualquiera, pera dirigir los canales sensoriales hacia el exterior. Todas estas medidas conducen a comprobar si nos estamos desmayando o mareando o si estamos 'funcionales'. Cuanto antes comprobemos nuestro estado y salgamos de la inmovilidad, antes podemos cercionarnos de que nuestro estado es mejor de lo que parece.
- Continuar haciendo lo que estamos haciendo (si estábamos haciendo algo) o inventarnos una tarea. Es muy probable que la situación de pánico se de encerrados en una coche, en un aula o despacho, esperando en la cola del banco o para pagar en el supermercado (preferiblemente con personas detrás y delante impidiéndonos la huida). Entonces hacer algo puede ser hablar, curiosear, pensar lo que comimos la semana pasada, escribir algo, escuchar o tararear música, o cualquier cosa que tenga la suficiente garra para distraernos).
- Esperar los minutos necesarios para relajarnos (pensar que cuando uno se altera tarda un ratito en serenarse, es importante no confundir esto con que 'fracasamos' en el control, así que no hay que tomarse como algo 'raro' el que tardemos nuestros cinco o diez minutos en lograr tranquilizarnos.
- No enfadarse (pensamientos como "!otra vez!", "¿qué hecho yo para merecer eso?", "¡esto es espantoso!" "!soy débil!" y similares aportan tanto nivel de adrenalina a la corriente sanguínea como la ansiedad. Además esta ira contribuye notablemente a que la próxima vez parezca más infernal.
- También esta totalmente contraindicado deprimirse como si a uno le estuviera sucediendo alguna gran desgracia o tuviera la peor suerte del mundo. Esto solo hacer que agrandar al 'enemigo' haciendo que la ansiedad parezca más tirana, abusiva e todopoderosa que nunca. En vez de deprimirse es más útil animarse todo lo que uno pueda haciendo cosas que compensen el mal sabor de boca dejado por el momento de pánico (actividades lúdicas o que nos den paz, goce y nos reconcilien con la vida como la buena música, la buena lectura, la buena conversación o el goce estético de las cosas). Uno puede hacerse algún tipo de 'regalito' como un remedio curativo muy eficaz para 'minimizar' la fuerza del miedo. Hay que recordar que tomarse las cosas con humor es un buen método para solucionar todo tipo de problemas de salud y de la vida en general. (Algunas personas en fase de superación suelen hablar con su miedo diciéndole "así que ya has venido a molestarme un poco ¿no?, pues has de saber que ya no me impresionas porque sé que mucho ruido pero sólo eres un poco de ansiedad fisiológica inocente, así que ahora ¿qué cosa agradable podríamos hacer? ¿tal vez hablar con esa persona encantadora que tanto nos gusta? ¿tal vez nos podemos ocupar en algo útil e interesante que nos permita cambiar de tema? ...").
- Dejarse ayudar por un profesional. Es una lástima que muchas personas tengan alergia a dejarse ayudar por un psicólogo como si su valía personal quedara en entredicho, porque de igual modo que nos dejamos orientar por un asesor fiscal, un inversor financiero, o el maitre de un restaurante, es más síntoma de inteligencia y sensatez que de otra cosa contar con el asesoramiento de un psicoterapeuta especialista en trastornos de ansiedad. Todos los puntos anteriores y otros más quedan mucho mejor aclarados y sobre todo, puestos en práctica, con el apoyo del psicólogo, de forma que nos aseguremos del éxito en el control de un miedo que ya se ha apoderado de nosotros. Ya sé que estamos en la era del bricolaje, hágaselo usted mismo y de la auto-ayuda y que ésta misma información la ha encontrado usted en internet, pero tampoco que hay exagerar tanto que pongamos en peligro nuestra propia salud y calidad de vida sólo por evitar el contacto del profesional. Si tiene ataques de pánico y/o agorafobia, dedique tiempo y medios necesarios para su solución correcta y completa
lunes, 11 de enero de 2010
FRUTAS QUE CURAN
AGUACATE
PROPIEDADES
Debido a que el aguacate contiene muchas grasas insaturadas ayuda a eliminar o regular el nivel de colesterol en la sangre, favorece la formación del colesterol bueno llamado HDL, este colesterol se encarga de transportar el colesterol al hígado, y desde ahí es eliminado a través de las bilis que son expulsadas al aparato digestivo.
Fortalece los huesos, mejora la visión, evita la formación de gases intestinales y tiene efectos beneficiosos en resfriados, catarros, jaquecas, neuralgias.
Externamente se emplea su aceite para afecciones reumáticas y los dolores de la gota.
Estimula el apetito, tonifica el sistema nervioso, regula la menstruación y alivia la tos.
La semilla del fruto, tostada y molida, buen diurético.
Disminuye el colesterol en la sangre.
Tiene casi 30 % de grasa insaturada. Contiene albúmina.
Vitaminas: Rico beta caroteno, B3, B5, C, E, ácido fólico y biotina, pequeñas cantidades de B1, B2 y B6.
Minerales: Ricos en calcio, magnesio, fósforo, potasio, azufre, pequeñas cantidades de cobre y hierro.
Calorías por 100 gramos: 223
sábado, 9 de enero de 2010
Los Mas Comunes Usos del Aloe Vera
El jugo del Aloe Vera, se puede utilizar como champú, fijador y acondicionador, con notables resultados tanto para el cabello, como para el cuero cabelludo. Cogiendo un trozo de hoja, se le sacan los bordes espinosos, y lo cortamos por la mitad. Nos lo pasaremos, bien por toda la cabeza. Este una vez seco, lo podemos dejar un rato, o bien toda la noche. Al día siguiente, lo aclaramos con agua, y Aloe dará brillo, fuerza y protección a los cabellos. Las enfermedades del cuero cabelludo, la grasa y la caspa, se tratan directamente, con jugo de Aloe Vera.
Higiene Bucal. Afta. Herpes Labial
Chupando un trozo de pulpa de Aloe Vera con constancia es un buen remedio para los dientes que sangran y que están hinchados, aligera el dolor de muelas y rebaja los flemones. También es preventivo de las caries y protege de los elementos agresivos que los desgastan, a lo largo del tiempo el esmalte de los dientes.
El afta, es una inflamación que afecta a las membranas de la boca, especialmente en los niños y en jóvenes; es tan doloroso que interfiere en la alimentación. Se recomienda que después de tener la pulpa de Aloe en la boca, se mastique y que se lo traguen, para que beneficie el paladar, el esófago y el estómago. Se ha de hacer más de una vez al día. Para el herpes labial, hemos de aplicar el aloe, sin el server, ya que este es cáustico, para eliminarlo, nada más hay que lavarlo con agua, frotándolo con los dedos.
Alergias
Es muy extraño ser alérgico al aloe vera. Para saberlo, nada más se tiene que frotar un poco de este, en la parte inferior del brazo, y si en unos minutos la zona tratada se enrojece o se siente picor, querrá decir que no podemos utilizarlo. Para los que tienen diferentes reacciones alérgicas la aplicación del aloe reduce o elimina los efectos de las otras reacciones.
Un remedio para el asma, es hacer cocer, trozos de hoja de Aloe en una olla, respirando el vapor o fregando las fosas nasales con un poco de jugo e inspirándolo de esta manera, reduciremos las molestias.
Quemaduras y escoceduras
El Aloe Vera es excelente como tratamiento en primeros auxilios. Para el dolor y reduce la posibilidad de infecciones y de cicatrices, al mismo tiempo agiliza el proceso curativo.
Desde la antigüedad, se usa el jugo de Aloe como calmante, hasta en la quemadura más seria. Aplicaremos continuamente, trozos de pulpa de Aloe con su piel, en la herida, y así evitaremos la posibilidad de infección, regenerando las células con poco o sin dolor alguno.
Quemaduras por el sol
Recomendamos aplicarlo a la piel, antes de tomar el sol, ya que es protector de rayos ultravioletas. Recuerde que se ha de tomar el sol con precaución y moderación.
Para el tratamiento de quemaduras leves, se aplica el jugo directamente en la piel, notando el alivio inmediatamente. Para quemaduras de más envergadura, pasamos un trozo de pulpa por encima de la herida, que este quede muy untada, así evitaremos el sobrecalentamiento de las células, y estas calienten a las vecinas, con la consecuencia de muerte por calentamiento celular. Se aplicará lo antes posible.
Cortes y heridas
El Aloe, desde siempre, ha sido popular en la curación de heridas y en la reducción de cicatrices. El viejo remedio casero, es usado en muchos sitios. Se limpia la herida, pondremos la pulpa sin pelar y lo fijaremos firmemente con una venda.
Hemorroides
El aloe es ligeramente laxante. Lo podemos usar de dos maneras complementarias: Ingiriendo un trozo de pulpa por la mañana y/o introduciendo en el recto un trozo después de evacuar. Si fuera Exterior, además de ingerirlo, se ha de colocar un trozo de hoja abierta, cubriendo la zona afectada. Hemos de seguir el tratamiento de forma continuada, hasta la desaparición total de la hemorroide.
Curación de cicatrices
Para la reducción y posible eliminación de cicatrices, hemos de aplicar jugo o pulpa, por la mañana y a la noche. Son necesarios algunos meses de aplicación: paciencia.
Varices
Las Venas varicosas suelen ser muy dolorosas. La aplicación externa de jugo en la zona afectada, da excelentes resultados.
Cáncer de Piel
Hemos de aplicar jugo de Aloe, de
Rasguños
Cortaremos un trozo de hoja y la aplicaremos en la zona afectada suavemente. La aplicación la haremos con frecuencia durante las primeras 24 horas. Disminuye el dolor y cura rápidamente estos tipos de heridas.
Acné
El Acné es causado por una profunda infección en los poros tapados por la grasa. Sucede generalmente en la adolescencia, porque la piel padece un proceso de cambio. Para tratar el acné con Aloe hemos de seguir estos pasos: Buena limpieza; Por la mañana y a la noche, hemos de limpiar nuestra piel. Hemos de tener cuidado, por que hay muchos jabones que son muy ásperos y no hemos de usar cremas grasas para la piel. Aplicaremos jugo de Aloe más de una vez al día. Regenera los tejidos de las capas interiores hacia el exterior y absorbe el exceso de grasa. Este estimula las capas profundas de la piel; al empezar el tratamiento, puede que estado de la piel durante unos días empeore. Hay que tener paciencia.
Si el Aloe Vera se usa con regularidad, es efectivo para reducir gradualmente las cicatrices que produce el acné. Aplicaremos el aloe a la mañana y a la noche, durante el tiempo que sea necesario, unos cuantos meses, hemos de ser constantes: es un pequeño precio para un cutis mejorado. De esta manera, no tan solo ayudará a reducir la cicatrices, sino que dará salud y color a la nueva piel. Si queremos que el tratamiento sea más efectivo, hemos de comer un trozo de aloe vera en ayuno por la mañana.
Picaduras de insectos, medusas, ortigas…
Cuando se produce la picadura de cualquier insecto, hemos de aplicar lo más pronto posible un trozo de pulpa encima de ésta. Notaremos gradualmente, la reducción del dolor y una rápida recuperación.
Psoriasis y erupciones eczematosas
Picor
Hay una molestia que se localiza en la parte interna de las piernas y en el engonal. El calentamiento y fricción, favorecen la irritación. Si aplicamos el Aloe dos veces al día, generalmente desaparece en un día o dos.
Pie de Atleta
Es una infección por hongos, más frecuentemente en hombre y especialmente en verano. La aplicación la haremos con una gasa empapada con jugo de aloe, que esta la pondremos alrededor de los dedos y la dejaremos actuar toda la noche, hasta la mañana siguiente.
Disfunciones del Aparato Genital Femenino
Pies cansados, con dolores
Es sorprendente el alivio que se siente, haciendo un masaje a los pies, usando jugo de aloe. También va muy bien poner los pies en agua caliente y trozos de aloe vera, frotando los pies con ellos. Produce un efecto revitalizador.
Dolores musculares, torceduras y Articulaciones Dolorosas
El Aloe es un inhibidor del dolor. Cuando se aplica sobre la piel, este es absorbido directamente por la sangre mediante las células; esto hace que alivie el dolor rápidamente. Se puede aplicar frecuentemente con calor o sin ella. Nos hemos de asegurar, que la superficie esté limpia. El remedio casero, es calentando una hoja, cortarla y aplicar la parte babosa sobre la zona dolorosa durante el máximo tiempo posible.
Desodorante
Una de las muchas propiedades del Aloe Vera es absorber y reducir el olor corporal. En este sentido, no es tan potente como los desodorantes modernos actuales, pero tampoco es tan cáustico. Es para aquellas personas que son alérgicas o que buscan alternativa natural.
Dolor de Cabeza, Sinusitis
Colocaremos un trozo de hoja de Aloe Vera sobre la frente. Frotaremos suavemente y dejaremos actuar durante unos minutos. También podemos empapar una gasa con jugo de una hoja de Aloe, y dejarlo sobre la frente. Si el dolor de Cabeza, es causado por presión de sinusitis, entonces la tela o gasa, ha de cubrir la zona nasal.
Nervios dolorosos
Otro beneficio sorprendente es la restauración de la sensibilidad en la piel, donde un nervio dolorido ha producido entumecimiento. La aplicación diaria de jugo o pulpa, restaura por entero la sensación en dos o tres meses, hasta en casas de pérdida de la sensibilidad años atrás, responde favorablemente a un tratamiento mantenido durante unos meses.
Enfermedades de la infancia
Para ayudar a bajar la fiebre, frotaremos en la nuca, la frente y en la planta de los pies, un trozo de pula de Aloe. La irritación que causen los pañales, desparecen aplicando jugo de Aloe Vera. Después de que se ha absorbido, se ha de hidratar la piel de un bebe...
El Aloe Vera como prevención
Aunque se esté en un excelente estado de salud, comer un trozo de Aloe Vera en ayuno frecuentemente, actúa como preventivo de enfermedades, ya que fortalece el sistema inmunológico. Da al cuerpo una acción enérgica, sobre todo por su contenido en germanio, hierro y titanio. Es un excelente tónico con propiedades afrodisíacas.
Recordar que el uso de Aloe Vera, es inocuo en cualquier parte del cuerpo, tanto ingerido como aplicado exteriormente. El Aloe Vera es muy eficaz en el tratamiento de trastornos digestivos. Tomar en ayuno, un trozo de Aloe, aligera los ardores y la acidez de estómago. Tomar un trozo de pulpa o dos al día, actúa como un tónico general y regulador intestinal. El jugo de la pulpa es un laxante suave.
Úlceras
Tendremos de tomar un trozo de pulpa de Aloe por la mañana en ayunas, y a la noche antes de ir a dormir, hasta que los síntomas desaparezcan. Después reduciremos la cantidad a la mitad. Es prudente, mantener una dieta baja durante un periodo de tiempo, para volver después progresivamente a la dieta normal.
Recordar que para comer el Aloe Vera, se puede pasar por la batidora, y si se quiere quitar el gusto amargo que da el sever (el jugo amarillento que hay entre la piel y la pulpa), se ha de lavar el trozo con agua y fregándolo con los dedos. Una vez pasado por la batidora, se puede mezclar con cualquier zumo de frutas.
Artritis y reumatismos
El Aloe Vera es un anti inflamatorio similar a la cortisona, pero sin sus efectos negativos. Comer un poco de pulpa de Aloe cada día, aleja el dolor de las articulaciones.
Anginas, dolor de cuello
El tratamiento lo podemos hacer de dos maneras: Cogeremos un trozo de pulpa y lo tendremos en la boca, durante un rato, masticándolo bien antes de tragárnoslo o haremos una mezcla con agua tibia y pulpa de Aloe Vera pasándola por la batidora y haremos gárgaras. El líquido se puede tragar para conseguir una penetración más profunda en la garganta. Se puede hacer de manera frecuente.
Ojos y oídos
Los ojos y los oídos, son uno de los órganos más delicados del cuerpo. Tanto para los ojos, como para los oídos, unas gotas de jugo de Aloe, hacen que se alivie el dolor y se queden relajados en pocos minutos. Otro tratamiento para los ojos, es fregarse los párpados con un trozo de Aloe. Es muy eficaz para el tratamiento de cataratas y para otras enfermedades de los ojos.
Verrugas y ojos de pollo
Aplicaremos un trozo de hoja de Aloe Vera, en todo tipo de verrugas y ojos de pollo, sujetándola, con un esparadrapo durante dos o tres semanas hasta que desaparezcan.
Osteoporosis
Comeremos dos veces al día en ayuno, un trozo de pulpa de Aloe, ya que es muy beneficioso para la osteoporosis. Como que aporta Vitaminas, ayuda a asimilar el calcio, y como a más es regenerador, para el avance de la enfermedad, hasta puede regenerar la masa ósea deteriorada. Es muy importante la constancia en el tratamiento.
domingo, 3 de enero de 2010
Curas de Limón
Según el doctor Vander, reconocido creador de nuevas teorías en Medicina, las curas de limón están indicadas en una amplia variedad de dolencias, algunas de ellas vinculadas con los problemas de metabolismo, otras con el aparato respiratorio, algunas con el área gastrointestinal, etc. etc.
La manera más positiva de realizarlas es empezando el primer día de la cura con el jugo de limón fresco. Luego del día dos al siete, aumentar un limón cada días hasta totalizar los siete. A continuación, se hace el tratamiento en orden descendiente, es decir de siete jugos diarios a uno solo.
En consecuencia, la cura de limón se hace a lo largo del período de 14 días. Si hace falta, se reanuda la cura después de una pausa de una o dos semanas.
¿Se debe tomar el jugo puro o mezclado?
Dependerá un poco del gusto y de la tolerancia de cada quien. No obstante, una manera muy común de hacer la cura del limón es mezclando la cantidad de jugo con suficiente agua. Esto resta acidez y resguarda del riesgo de deñar el esmalte de los dientes.
Este tipo de cura favorece varios beneficios sobre el organismo. Desintoxica y alcaniliza la sangre. Inhibe las fermentaciones putrefactivas y control la producción de ácidos estomacales. Depura y tonifica, estimula y protege contra las infecciones.
La manera más positiva de realizarlas es empezando el primer día de la cura con el jugo de limón fresco. Luego del día dos al siete, aumentar un limón cada días hasta totalizar los siete. A continuación, se hace el tratamiento en orden descendiente, es decir de siete jugos diarios a uno solo.
En consecuencia, la cura de limón se hace a lo largo del período de 14 días. Si hace falta, se reanuda la cura después de una pausa de una o dos semanas.
¿Se debe tomar el jugo puro o mezclado?
Dependerá un poco del gusto y de la tolerancia de cada quien. No obstante, una manera muy común de hacer la cura del limón es mezclando la cantidad de jugo con suficiente agua. Esto resta acidez y resguarda del riesgo de deñar el esmalte de los dientes.
Este tipo de cura favorece varios beneficios sobre el organismo. Desintoxica y alcaniliza la sangre. Inhibe las fermentaciones putrefactivas y control la producción de ácidos estomacales. Depura y tonifica, estimula y protege contra las infecciones.
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